La Regional Paraná de la CGT lanzó un documento en el que señaló “la grave situación social” que afecta a la clase trabajadora y en ese marco advirtió que “el hambre no puede esperar”, por lo que reclamó al gobierno nacional la “urgente declaración de la emergencia alimentaria y nutricional”.
La CGT Paraná difundió su declaración tras un encuentro que dirigentes de organizaciones gremiales nucleados en la central obrera mantuvieron con el Arzobispo de Paraná, monseñor Juan Alberto Puiggari. De la reunión también participaron referentes de CTA.
“En conjunto con el Arzobispado de Paraná reclamamos la urgente declaración de la emergencia alimentaria y nutricional, en consonancia con la CGT y la Conferencia Episcopal Nacional”, manifestó la declaración de la dirigencia sindical entrerriana.
El reclamo de la Regional surgió tras un crudo análisis que alertó sobre “la grave situación social que atraviesan hermanas y hermanos de nuestro país, sumergidos en la pobreza e indigencia”, por lo cual la CGT Paraná exigió “la urgente acción del Estado Nacional”.
El documento señaló “la fuerte caída de ingresos laborales y sociales” de trabajadores ocupados, de la economía popular, jubilados y beneficiarios de planes sociales “por efecto de la inflación y la devaluación”, situación considerada “sin demasiados antecedentes en nuestra historia”.
En ese sentido, la CGT Paraná señaló además que “la extrema situación de calle en la que han caído compañeras y compañeros, las dificultades para alcanzar niveles básicos de alimentación y nutrición de millones de niños y adultos mayores, hoy se expresa con severidad y dramatismo”.
Al respecto, la central sindical paranaense citó “los balances sociales e investigaciones efectuadas por la Comisión Episcopal de la Pastoral Social de la Iglesia, por numerosas y prestigiosas Universidades Nacionales, por organismos e instituciones de reconocida trayectoria, todos ellos confirmados por los datos oficiales del Indec”, por lo que consideró “impostergable tomar medidas urgentes y extraordinarias”.
La Regional de la CGT destacó que “nuestro país tiene una larga tradición en redes de solidaridad”, y en especial resaltó “el rol que cumplen nuestras organizaciones gremiales llevando tareas como la atención en comedores, merenderos y trabajo social en diferentes puntos del país y de nuestra provincia”.
No obstante, la declaración sostuvo que “es obligación primaria, indelegable y constitutiva de todo Estado, el garantizar la alimentación y nutrición adecuadas a toda la población, y la inmediata convocatoria a todos los actores sociales con responsabilidad, probada experiencia e infraestructura disponible a coordinar acciones conjuntas para atacar el flagelo del hambre”.
Por lo expuesto, la CGT durante el encuentro con el Arzobispo de Paraná, monseñor Puiggari, solicitó “articular acciones conjuntas con la Iglesia para llevar Paz a todos los ámbitos de la comunidad en general”.
En la misma línea, la dirigencia gremial paranaense anunció: “Llevaremos acciones conjuntas con la Pastoral Social local, tanto para forjar la Cultura del Encuentro, como así también ser parte de la solución en los conflictos, y así profundizar el camino hacia el diálogo y la paz social”.